Mónica Suárez Pradilla, profesora del Centro de Estudios en Vías y Transporte, analiza los efectos positivos de implementar alternativas de movilidad sostenible en las ciudades.
La doctora Mónica Marcela Suárez Pradilla, ingeniera civil y profesora del Centro de Estudios en Vías y Transporte, explicó los beneficios de integrar diversos medios de transporte que fomentan la movilidad sostenible en nuestro día a día.
M.S.P.:
En Colombia, aproximadamente el 70% de la población vive en ciudades, y un gran porcentaje se ubica en las zonas de periferia, lo que implica amplios tiempos de viaje para desarrollar cualquier actividad. En las últimas décadas, algunas ciudades colombianas han implementado sistemas de transporte público masivo tipo BRT. Asimismo, se han desarrollado diferentes estrategias que buscan incrementar la cuota modal en transportes sostenibles como el incremento de kilómetros de infraestructura para bicicletas y peatones, la electrificación del transporte, tecnologías de transporte inteligente, educación y concientización, entre otras con el objetivo de redefinir la movilidad urbana, impulsar la movilidad activa, la micromovilidad y mejorar la seguridad vial
A nivel de políticas públicas, la movilidad urbana en Colombia se está alineado con las diferentes metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y empieza a promover un modelo urbano de proximidad. Además, se han implementado planes de movilidad sostenible y segura PMSS en los que se incluyen diferentes categorías que responden a las condiciones de conectividad, accesibilidad y desplazamiento para municipios, distritos y áreas metropolitanas.
A pesar de estos avances, siguen existiendo grandes desafíos. En algunos casos, los tiempos de viaje a nivel urbano superan los 90 minutos, el uso de la infraestructura vial es desequilibrado, el número de motocicletas sigue aumentando, existe una alta tasa de siniestros viales y no es clara la intermodalidad en los sistemas de transporte. Por ello, es necesario seguir impulsando una movilidad más inclusiva y ecológica para lograr un mayor desarrollo a nivel local.
M.S.P.: La electrificación del transporte motorizado disminuye la dependencia de los combustibles fósiles, siendo más respetuosa con el medioambiente. Contribuye significativamente a la mitigación del cambio climático al reducir considerablemente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Además, juega un papel clave en la descarbonización del sector transporte, con efectos beneficiosos para la calidad del aire y la salud pública, y contribuye a disminuir las enfermedades respiratorias relacionadas con la contaminación.
La transición a la movilidad eléctrica, particularmente en las ciudades, es una oportunidad para cambiar los hábitos de transporte. Sin embargo, el impacto efectivo de este tipo de movilidad depende en gran medida de una planificación urbana sostenible. Esta planificación debe centrarse en la reducción de viajes innecesarios, la adopción de sistemas de movilidad sostenible y la mejora de los sistemas de transporte existentes.
M.S.P.: En el contexto urbano, las bicicletas y patinetas eléctricas son una opción para los viajes de menor distancia, y para viajes de dos o más etapas representan una solución de intermodalidad efectiva. Contribuyen a la disminución de los GEI y tienen un impacto significativo en el bienestar y la salud de los usuarios que es una meta del ODS 3. Además, contribuyen a reducir la huella de carbono, mejorar la accesibilidad, disminuir la congestión del tráfico para desarrollar ciudades y comunidades sostenibles (ODS 11). Es fundamental destacar que el éxito de estos beneficios depende de la integración efectiva de estos modos con la oferta de transporte público masivo de las ciudades.
M.S.P.: Es importante en Colombia adquirir un compromiso definitivo en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), ya que las emisiones del sector transporte actualmente representan aproximadamente el 12% de acuerdo con Ministerio de Ambiente, el Departamento Nacional de Planeación y el Ideam, pero presentan una tendencia a crecer. También es necesario considerar los impactos de estas en la salud pública, así como en el disfrute del espacio público. Por lo tanto, buscar una movilidad centrada en el acceso equitativo y seguro de las personas contribuye a generar mayor productividad, bienestar y calidad de vida. Finalmente, se debe insistir en la articulación de la planificación urbana, la movilidad y el transporte en pro de tener ciudades accesibles, equitativas y saludables (ODS 11).
