Tres dispositivos para desinfectar áreas de trabajo y estudio entrarán en etapa de pruebas en la universidad. Los modelos de validación fueron desarrollados por investigadores del programa de Ingeniería Biomédica de la Escuela.
“El Covid 19 no se ha ido. Muchas personas siguen llegando a las salas de urgencia de los hospitales y siguen muriendo por esta enfermedad, sobre todo aquellos que no han cumplido con el plan de vacunación nacional”.
La afirmación fue hecha esta semana por Luis Eduardo Rodríguez Cheu, Director de Investigación e Innovación y Decano de Ingeniería Biomédica de la Escuela Colombiana de Ingeniería Julio Garavito, al hacer la entrega oficial de tres prototipos para desinfección de áreas de trabajo de la universidad.
Según el Decano, quienes piensan que el Covid es cosa del pasado están equivocados. Doblemente equivocados, dice el investigador porque, aunque no hay picos de la enfermedad, sí hay nuevos virus que están afectando a la población mundial.
En Colombia, por ejemplo, ya se han registrado casos de la viruela del mono, frecuentes casos de neumonía y con las lluvias que se avecinan, seguramente aumentarán los resfriados y las peligrosas gripas. “Sobradas razones para continuar con la desinfección de los espacios donde se trabaja o estudia, y en nuestro caso, para reforzar los desarrollos tecnológicos que nos ayuden a cumplir con la normativa de bioseguridad en los salones de clase”, dice el ingeniero Rodríguez Cheu.
Todas estas razones se tuvieron en cuenta al construir los dispositivos de desinfección que cuentan con dos tecnologías: aspersión química y lámparas UVC Ultravioleta de Onda Corta, cuyas áreas de desinfección pueden llegar hasta distancias entre cinco y diez metros. De noche, explica el ingeniero, la luz ultravioleta se focaliza más y se tiene un alcance mayor de desinfección.
En el caso de la aspersión, se comenzó haciendo utilizando mezcla de hipoclorito, alcohol y agua, sin embargo, se cambió a alcohol al 70 por ciento para evitar el daño a la salud, las superficies y la ropa, pero se trabajarán otras alternativas de desinfectantes que no afecten la salud humana.
Los dispositivos serán probados y validados en el Campus de la Escuela. De este ejercicio se obtendrá información valiosa para mejorarlos, adecuarlos y ofrecerlos a la industria colombiana. “Se trata de un sistema electrónico que envía una señal al celular, el cual activa una bomba DC de 12 voltios manejada por una batería con muy buena autonomía y la lámpara UVC alimentada por un inversor de AC para poder producir la cantidad de intensidad lumínica.”, explica el ingeniero.
De estos se hicieron varios diseños y se probaron varias alturas del carrito, con el fin de que las lámparas irradiaran luz en todos los sentidos. En el caso de la aspersión se van a probar varios líquidos que no solo ataquen el Covid sino otros virus u organismos que puedan enfermar a las personas.
La idea, dice Rodríguez Cheu, es comercializarlo. “Ya tuvimos un primer acercamiento con varias empresas y ahora estamos en conversaciones con una empresa de Zipaquirá”.
Los desarrollos tecnológicos que se probarán en la Escuela comenzaron a construirse en el año 2021 en el marco del proyecto Covibot, con recursos propios y por petición expresa del rector Alfonso Rodríguez Díaz, quien considera que cualquier acción es poca cuando se trata de cuidar la salud y prevenir enfermedades.
Los prototipos son tecnología ciento por ciento colombiana y hechos por investigadores de Ingeniería Biomédica (los equipos de trabajo de Carlos Cifuentes y Sergio Sierra), el control es inalámbrico, se pueden prender y apagar a distancia a través de una aplicación fácil de instalar en los teléfonos móviles, lo que da pie a que sean autónomos y seguro para las personas que los manejaran.